después
61Al avariento y al puerco, después de muertos. — Porque tanto uno como otro sólo entonces se vuelven provechosos para los demás …
62Al que yerra, perdónale una vez, mas no después. — Aconseja perdonar los errores de los demás, mas no cuando éstos se hacen crónicos. Dijo Thomas Szasz: «El estúpido ni perdona ni olvida; el ingenuo perdona y olvida, y el inteligente perdona, pero no olvida.» …
63Buenas son mangas después de pascua. — Señala que nada, por insignificante que parezca, debe ser objeto de desdén, si es regalado. Con el mismo sentido se dice: Venga el bocado, y venga pocho …
64Ciertas son las trazas, después de las desgracias. — Dícese irónicamente contra el que, una vez ocurrido algún suceso aciago, se jacta de haberlo presentido con pelos y señales. De éste se dice también jocosamente: «Por adivino, le pueden dar cien azotes.» …
65Como miel fue la venida, amarga después la vida. — Advierte que no pocas cosas que al principio son muy agradables, con el paso del tiempo se vuelven enojosas …
66Español da tiza después que pifia, (El) — En analogía con el juego del billar, dice que los españoles sólo cuando ya es demasiado tarde tratan de poner remedio a las cosas …
67Febrerillo el loco, con sus días veintiocho, sacó a su padre al sol, y después lo apedreó. — Al igual que otros varios, fustiga este refrán la versatilidad meteorológica del mes de febrero, porque al buen tiempo intempestivo a menudo suceden las lluvias torrenciales y aun el granizo devastador …
68Justicia de Peralvillo, que después de ahorcado el hombre le leían la sentencia del delito, (La) — Reprende el refrán a aquellos tribunales que no conceden a los reos las suficientes garantías procesales. En particular, se refiere al antiguo tribunal de la Santa Hermandad, que ejecutaba sin más a los delincuentes y, tras dejar el cadáver… …
69Murcia la rucia, cuánto bellaco te busca, y después de haberte hallado no te quisiera haber buscado. — Según Correas, «dícese porque es tierra adonde acude gente de mal vivir, facinerosos y rufianes, y siendo allí corregidor don Luis de Godoy les persiguió y escarmentó de manera que no le paró ninguno, y causó este refrán» …
70Por guasón ahorcaron a Revenga, y después de ahorcado sacaba la lengua. — Resalta la actitud usual del obstinado, al que ningún castigo, por duro que sea, consigue doblegar …